Tres astronautas chinos, también conocidos como “taikonautas,” regresaron a salvo a la Tierra después de completar una misión de seis meses en la estación espacial Tiangong de China. La cápsula aterrizó en la región de Mongolia Interior, marcando el exitoso final de su estadía en la estación, una plataforma avanzada que representa un paso importante en la creciente presencia de China en la exploración espacial.
Durante la misión, la tripulación realizó varios experimentos científicos, tareas de mantenimiento y hasta caminatas espaciales. Esta misión resalta la dedicación de China a sus ambiciosos objetivos espaciales, con la meta de establecerse como un actor principal junto a EE. UU. y otras naciones. China planea enviar humanos a la Luna para 2030, avanzando hacia mayores hitos en exploración espacial. La estación Tiangong, que significa “Palacio Celestial”, sigue acogiendo misiones que permitirán a China profundizar su conocimiento del espacio y sus posibilidades.
Este regreso exitoso ilustra la fiabilidad de la tecnología espacial de China y refuerza su posición en la carrera espacial global.